Cuando su mano se entrelaza con la mía, cuando acaricio su cabello, cuando siento su respiración, hay en mi un estallido interno. Solo quiero estar con él, solo quiero verlo a él, solo quiero compartir con él. Me llena, me anima, me enloquece, me da vida. Amo cada centímetro de él. Amo lo que soy con él. Amo todo de él. Lo amo a él.
Su mirada, su sonrisa, sus besos, sus lunares, sus manos... Todo es un complemento perfecto. Solo anhelo, cada día despertar a su lado, escuchando su voz, solo su tierna voz. Y admirando, sus hermosos ojos cafés. Haciéndolo feliz por lo que me resta de vida, aún más de lo que me hace a mi.
