Fue como aquel primer beso esperado. Como dos tiernos niños con miedo a besar. Allí estaba el, esperando que yo diera el paso, y allí estaba yo, esperando que él lo hiciera... Mientras poco a poco, fuimos acercándonos hasta rozar nuestros labios, y lograr, un primer beso.
Podría decir, que ha sido, el beso más tierno e inolvidable que me han dado. Solo recuerdo el día que dijo lo que sentía por mi, su voz quebrada, temblorosa, sus manos frías, su mirada tímida. Y el día del primer beso... Comprueba que es mi historia más linda, y quisiera que fuera esa única y última que tenga.
Recuerdo ese 31, como si hubiese ocurrido hoy. Creí notar cierta felicidad, como si hubiera esperado ese momento tanto como yo. Y hoy, pasé un día maravilloso con él (cada día compartimos más), aprendiendo cosas nuevas de él, y aprendiendo a aprender de él.
Algo que opaca mi felicidad, es irme, continuar con mis estudios en otro lugar. No quisiera irme sin él. Pero debo hacerlo, él no quiere ser un impedimento, y le prometí que no lo sería. Esa parte de mi vida, la mantengo en oración, esperando que Dios haga su voluntad. Si el será para mi, Dios me lo mantendrá. Sino, Dios sabrá. A pesar de quererlo, y de todo lo hermoso que hemos pasado, debo mantener eso en mente, no puedo dejarme llevar por mis sentimientos. Primero lo primero, terminar de estudiar, y lo demás que sea lo que Dios quiera. Estos meses que me mantenga aquí, mientras sale la decisión de si me voy o no, los disfrutare junto a él. Disfrutaré de mi presente y de mi futuro se encargara Dios.
PD: La imagen del juego tiene un significado especial :$