Bien, ayer y hoy no me he sentido muy bien que se diga. Ayer estuve pensando mucho sobre una antigua relación, y sentí una gran culpa, en esa relación le rompí el corazón al chico, de verdad lo quise, pero no como debí hacerlo. A veces pienso que fue lo mejor terminar, ya que no me estaba convirtiendo en muy buena persona, además no quise herirlo, simplemente paso, no pude quererlo mas y el se enamoró mas de lo que debió... Hoy en día no hablamos, piensa que es lo mejor para él (tal vez lo es).. Aunque yo quisiera hablarle normal, después de todo fue alguien importante en mi vida, lo que vivimos no se olvida así como así, pero el prefiere hacer como si fuésemos, dos desconocidos...
Hoy, anduve (ando) estresada con las obligaciones de clases y también como malestar físico, a veces siento que quisiera dormir y no volver a despertar. Siento que estoy llegando a mi límite. Cada más hay mas cosas juntas, pienso que mi cerebro no da para tanto, pero ahí es donde oro, pido a Dios que me ayude porque lo necesito ahora y siempre. Y realmente me responde, gracias a él puedo seguir adelante, tanto en el ámbito estudiantil como sentimental. Ya que hay oportunidades que quisiera estallar porque por todos lados siento problemas. Pero gracias a Dios puedo llevarlos. Y le pido paciencia para lo que venga...
